OLVIDAR CASI TODAS LAS CANCIONES
La tristeza no tiene sabor como tampoco lo tiene la alegría. Vivimos entre emociones insípidas y supravaloradas. Hoy es domingo, tal vez Dios este dispuesto a no contar más mentiras. En realidad no podría asegurar el día de la semana en que se mueven los cuerpos que llevan horas y horas esperando a la noche. Los días no acaban cuando indican los relojes sin embargo la mirada fría de las sábanas hace entrar en razón a demasiados hombres. Imagino su quietud y tomo conciencia de que este siglo estará sin duda dominado por los objetos. No sólo mienten los dioses, también lo hacen los directores de cine y los cantantes de rock que al final no lograron dejar un bonito cadáver. Llega el momento de olvidar casi todas las canciones.
Prefiero recordarlas quiero olvidar lo que solamente no he amado o quizás lo que he sufrido un abrazo desde Miami
ResponderEliminar